Desde el 17 de diciembre en las disquerías de todo el país, arribó Pesados Vestigos: la flamante y muy esperada placa de La Renga. El trío de Mataderos despide el año que estuvo ausente en los escenarios, con un disco para sonar en la ruta. El envase como en las últimas oportunidades sorprende: una caja de cartón que simula un viejo maletín de turista con estampillas, donde las canciones parecen ser los destinos. Dentro del mismo un sinfín de sorpresas: fotos de Gustavo Nápoli, Tete y Tanque Iglesias como atuendo de época, son protagonistas de una historia donde escapan y buscan la fuga de Manuel Varela. Hay también sellos postales, papeles de carta (donde presentan las letras) y un misterioso doble fondo, donde aparecen un revólver de antaño y un ejemplar de la publicación anarquista Pampa Libre.

El disco aparece en un sobre de cartón, a modo de un viejo longplay. A esas once canciones, los nuevos himnos de los mismos de siempre las revisamos en sus detalles y curiosidades:

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Corazón Fugitivo: La primera canción que se conoció del disco. Un viaje épico, con descripción clara de caminos y paisajes sueños, donde la pluma de Nápoli acerca la necesidad de liberar sentimientos con el transcurrir del viaje hacia la fuga.

Nómades: Un rock and roll setentista que continua la línea rutera, donde se destacan los punteos de guitarra y un estribillo pegadizo “Uhhh adónde esta mi hogar, mi casa se aleja”. Nostalgia de distancia y enredarse entre carreteras, lejos del pago.

Mirada de acantilado: La poesía se vuelve fatalista en un recorrido a ciegas y festivo del paisaje. Tete Iglesias aporta voces y gritos, algo inédito para una canción renga. En esta canción, parece un regreso de la banda una mirada algo más urbana, tanto en el sonido como en las letras.

Día de Sol: Una de los temas llamados a ser himnos “rengos”, quizás a la altura de La razón que te demora. Un viaje en la ruta con la moto a fondo, con el viento a favor y una crítica al encierro que supone las redes sociales en una “pantalla fría”. La voz de Gustavo Nápoli se luce en el estribillo, sin esfuerzos, al sonar rockero de la banda.

Sabes que: Una balada épica que puede vincularse con Ricardo Iorio versionando clásicos del rock nacional. Justamente el prócer Ricardo Soulé canta y toca el violín, mientras Chizzo pone en valor, la valentía de vencer la tristeza: “El pesar que te toca vivir es sólo para que / puedas engrandecerte”.

San Miguel: Una de los rocanroles a pedido. Una canción que habla de Miguel Keko Ramírez, haciendo un juego entre su nombre y el Club San Miguel, los colores que lo hacían vivir. La Renga lo inmortaliza en el canto y abraza a la vanguardia del oeste, la legendaria banda que los acompaña a todas partes.

Pole: Del puño de Nápoli sale un emotivo homenaje a su viejo amigo Víctor Poleri, actor en los videoclips de la banda y quien organizaba las primeras escenografías y vestuarios (Ver el show de Obras ’95). Con sonidos alrededor del punk, y aunque describe los recuerdos al viejo amigo, la canción puede también dedicarse a cualquier amigo que no está.

Muy indignado: Con acidez e ironía, la  letra carga contra aquellos críticos de su participación en los festejos de los 30 años de la Democracia, en diciembre de 2013. “Muy  indignados te van a decir / que lo que haces está mal / que así no es como ellos querían / de repente sos una porquería…” sin encriptación, La Renga responde.

No para de aletear: Un rock pesado y a toda velocidad, que recuerda por momentos a Body Count o al sonido impuesto en Algún Rayo. Aparecen los vientos de Manuel y Garófalo, para la canción más poderosa del disco.

Motorock: La intro desorienta a los años 20’s, pero quiebra a un rock and roll que invitar a salir a la autopista antes que salga el sol: “Una banda que tocaba motocicletas descontroladas / iba al borde del abismo/ iba leyendo el precipicio”.

Masomenos Blues: Esta vez el título de Blues no nos engaña (chequear el fiestero Blues de Bolivia ó el hardrock Blues Cardíaco), un blus cansino de letra espesa. En la letra del tema descubrimos el título al disco: “Y llevo prendido desechos de olvidos / pesados vestigios de una confusión”.

En vivo. La presentación nacional de Pesados Vestigios será el próximo sábado 24 de enero de 2015 en el Aeródromo de Villa Rumipal. Las entradas tienen un precio $300 y los puntos de venta se pueden conocer en el sitio oficial (http://www.larenga.com).